Semana de mucho trabajo y poco tiempo libre. Y lo que me espera hasta finales de febrero.
Llevo desde el sábado pasado queriendo escribir lo que ha ido aconteciendo pero no hay manera... al final he encontrado un hueco.
...
Como el sábado me tocó trabajar por la mañana y no queriamos esperar hasta el fin de semana próximo, nos liamos la manta a la cabeza y con más miedo que verguenza nos acercamos al campo de vuelo, Mario, Inma, Mar, Isma y yo, después de comer y, como era de suponer, no había nadie allí (de ahí el miedo). Pero al final no fue para tanto la cosa, conseguimos arrancar sin problemas, conseguimos despegar sin problemas, volamos varias veces con casi ningún problema, y aterrizamos otras cuantas con todos los problemas del mundo...
...
Al poco de estar allí conocimos a otro miembro del club, Miguel, que apareció con un montón de aviones, cuyas evoluciones por el aire hicieron las delicias de toda la familia que estabamos allí congregados. Como suele ser costumbre en este hobby, Miguel derrochó una gran simpatía con nosotros y, al darse cuenta, de que a Ismael le costaba un poco atreverse a aterrizar, se acercó a él y le estuvo ayudando hasta que, casi sin darse cuenta (bueno, sin el casi, porque luego dijo que ni siquiera había sido consciente de haber aterrizado él solo) realizó su primer aterrizaje. A partir de aquí le cambió la cara y se empezó a encontrar más seguro.
Luego me me dijo que también le había dado mucha confianza el hecho de que en el segundo vuelo que hizo, antes de la llegada de Miguel, yo me alejara de donde estaba pilotando dejándole solo (hasta ahora siempre había estado a su lado dándole instrucciones, supongo que algunas acertadas y otras no, y me había percatado de que eso le ponía algo nervioso, así que decidí alejarme discretamente y hacer como que estaba a otra cosa mientras le seguía mirando de reojo, jejejeje). Estuvimos allí hasta que las luces del atardecer, que llegaron pronto, confudían los colores del avión y empezó a resultar difícil verlo bien en el aire. Lo pasamos genial.
...
La semana pasada al final concreté mi ingreso en el Club RC Impacto... ¡ ya somos socios !. Le comenté a Pedro 'el presi' en un correo que contaran conmigo para lo que fuese y que no me importaba, ya que la web del club estaba parada desde hace mucho tiempo, tratar de renovarla un poco. Como este mundo sigue siendo un pañuelo resulta que en la última reunión del club uno de los socios ya se había ofrecido para lo mismo y ya había puesto manos a la obra con un resultado excelente....
...adivinad quien era el socio.... ¡ Miguel ! . Al que en condiciones normales no habriamos conocido ya que el solo suele ir por las tardes.
Así que esta semana me he puesto en contacto con él para ver si puedo ser de alguna ayuda, aunque me parece que se vale solo ya que controla muchisimo más que yo.... en fin, ahí andamos. Si me acabo pronto con los líos de este mes me pondré a echar un ojo a ver si se puede aportar algo, y de paso seguir con el 'charlie' que lo tengo 'abandonao' al pobre.
...
Estoy deseando que llegue el sábado por la mañana para volver al campo de vuelo, eso si que no lo voy a perdonar.
...
No hay comentarios:
Publicar un comentario